Ritchie Blackmore era uno de los genios de Deep Purple ( obviamente porque en aquella mítica banda, al que no fuera un genio absoluto le debían dar collejas y robar la merienda), y quizás el guitarrista con más fama de inaguantable que rodaba cabezas por aquella época ( y con toda probabilidad de la historia ), y en 1975 cuando la banda estaba en la cumbre se le metió entre ceja y ceja salirse del mapa por discrepancias con el resto de la banda y formar su propio grupo.
La primera decisión de Blackmore fue reclutar al ex vocalista de una banda llamada ELF, un pequeño cantante que en pocos años se convirtió en uno de los grandes vocalistas del hard rock de todos los tiempos; Ronnie James Dio.
Después de publicar un primer album titulado Ritchie Blackmore´s Rainbow, en donde la épica, los sonidos Purpleianos, el virtuosismo y el hard rock sublime, son el denominador común, la banda se embarca en una nueva aventura con la publicación de un segundo album, el fantastico Rising, una de las obras maestras del hard rock de los setenta.
Para este nuevo trabajo Blackmore cambio casi por completo la formación de la banda (algo muy habitual en el proceder del guitarrista), y el primer cambio sería a las baquetas, con un Cozy Powell espectacular e irrepetible, ademas de un nuevo bajista; Jimmy Bain y Tony Carey en los teclados.
Con esta formidable formación se graba el nuevo album que se convierte en trascendental, un disco solemne y sobrio, que ha quedado para la posteridad como un trabajo irrepetible y mágico, aparte de ser uno de los más valiosos y modélicos gérmenes del heavy metal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario